No sé como, pero te has convertido en un comodín (y eso no es bueno) ¿Quiero sentirme mal? ¡genial! Estás tú ahí, para sentirme mal... y lo peor es que tienes más de una cara.
¿quién eres?
He llegado a una conclusión; no existes. (aquella que me escribió cartas, aquella chica para mí, no existe).
¿tristeza? No, para nada.