Te lamento y me escribo
y sonrío y camino
detrás de aquellos sueños tan solo
de tu enemigo.
Me pregunto tantas veces si solo sentiré mi corazón
(perdido)
en un inmenso abismo de solución inexistente, con tu crío,
tus amigos, mi mirada y tu hastío...
¿eso existe?
Que si tu sendero existe
desvivo por conseguirlo,
poemas que me destruyen
y un blog que aún no es mío.
Te diviertes a mi costa ¿te parece entretenido?
Lo que sea. Aquí estoy, esperando el llamado
del resentimiento ansiado; un libro que ya no escribo.
¿me sonríes? No lo creo.
Sigo solo en el sentido... te espero;
¿te espero?
El regreso no es lo mío...
solo quiero saber si es cierto
ese extraño frío
que me invade.. el letargo...
solo frustración y un cuento....