¿Cuantas veces te he escrito en este blog? He perdido ya la cuenta.
Hoy, al salir por la noche a la calle, el olor a invierno anuncia los sentimientos solitarios sobre ti y tu cabeza, y tu manera de acabar con todo lo que hemos hecho. ¿tú manera? ¿hemos hecho algo siquiera? Me niego a entregarte esto como una segunda carta.
Ya me había acostado, pero los recuerdos y los reproches (injustificados) giran sobre mi cerebro, vuelan circularmente, ritmo constante, ritmo de galeras obligándome a hundir la cabeza sobre la almohada, revolver meses representados en dos preguntas: ¿porqué tú? ¿porqué no?
No lo sé... me siento raro... y, semicompletamente, me siento raro por ti. Prefiero ignorar tu tendencia a fabricar momentos y resaltar los momentos que has fabricado. Tal vez me gustas porque te presiento en mi frecuencia, porque tus caprichos te trasladan al mundo real y destrozan la perfección maniquea donde suelo acomodar a la gente que quiero querer. Eres mi frecuencia. Eres los viajes que quieres hacer, eres llamadas a las 6 am., eres museos, eres CU.
La respuesta es clara: NO. Estoy consciente, nada te hará cambiarla y yo no puedo hacer nada para evadirla... tan solo quiero escucharla porque no soporto asumir las cosas. ¿luego que vendrá? Distancia, creo. Lo mejor es alejarse, buscar sentimientos afines que cultivar, buscar museos y cerveza, buscar viajes. ¿buscarte? no. No quiero repetirte. Siempre nos quedará el jueves.
Volveré cuando no me importes.
(...Odio cuando pasa esto...)
hola como estabn esta chido esto
Escrito por edgar a las 7 de Agosto 2007 a las 11:18 PM