Y después de todo sigo aquí sentada, a oscuras, entreabriendo los ojos muy de vez en cuando para ver lo mismo de siempre. Todas las noches son muy parecidas: 10 ventanas de messenger, ninguna que aporte nada muy interesante (dios, qué enfermedad tan molesta puede ser el messenger), música triste para complementar mi estado de ánimo, una espera dentro de mí a que suene el teléfono y me de alguna noticia interesante, la certeza de ser la única despierta en mi casa, el mal humor.
El jueves pasado fui a pedir trabajo a los cafés de la Condesa. ME llamaron de domino´s para hacerme una entrevista para el trabajo de telefonista. (Domino´s pizza buenas tardes, atiende Fernanda, le recordamos que tenemos 2 * 1 en todas las pizzas medianas y por 30 pesos más le mandamos unos canelazos y un refresco gratis... que va a ordenar?) Creo que no es lo mío. Además me parecieron un poco autoritarios. En la hoja de requisitos decia: Pantalón de vestir color caqui (NO de pana, no de lycra, sin valenciana, sin campana). Carajo. No sabía que a los telefonistas les vieran las valencianas. Qué terrible.
Por otro lado, sigo esperando un milagro para volver a ver al chico x. Por alguna extrañísima razón me da pena conseguir su teléfono y buscarlo de manera directa. Más bien me resigno: Qué tristeza. Odio resignarme. Es tan triste, frustrante, apático, desesperanzador.... pero, ¿qué hago? me da miedo volver a cagarla, que todo salga mal por enésima vez y entonces sentirme mal y otra vez la necesidad de estar con alguien, la inseguridad, de vuelta como ahora. Shakira lo dice bien. "La resignación es un deseo sin piel".
Por cierto. Compré el nuevo disco de Shakira. Como una buena fan, corrí a las diez de la mañana del 7 de junio, el día que salió. Tiene menos calidad lírica que los anteriores, y un estilo más romanticón, pero la verdad es que aún así me gustó. Recomiendo "La pared", "No" y "Lo imprescindible". Lo malo de ese disco es que me recuerde a cierta persona que está lejos de la cual no me quiero acordar muy seguido porque no se bien qué es lo que siento cuando me acuerdo de él pero es algo poco agradable.....
El viernes me puse otra peda de esas que ahora agarro como vienen.. la única consecuencia seria fue un brazo madreado, nada serio. Espero no me afecte para el sábado, mi clase abierta de jazz, que me va a salir hermosa y me va a quitar la monotonía. La danza es maravillosa. Ojalá pudiera bailar tooodo el día y tooooda la noche........